Virtusa ayudó con éxito a un banco español líder en la lucha contra el fraude financiero con una solución antiblanqueo (AML) basada en análisis.
El cliente es una empresa multinacional de servicios financieros con sede en España que está presente en todos los centros financieros mundiales como una de las mayores instituciones bancarias del mundo. El equipo de análisis y cumplimiento normativo del banco se encarga de rastrear los intentos de blanqueo de capitales de sus clientes corporativos.
La normativa financiera española obliga a todos los bancos a disponer de un sistema de control basado en reglas para rastrear diversas operaciones de blanqueo de capitales y notificar las operaciones sospechosas a los reguladores. Sin embargo, con el aumento de la sofisticación de los esquemas de blanqueo de capitales, el sistema basado en reglas se está volviendo obsoleto e ineficaz. De ahí que sea inevitable la necesidad de utilizar análisis más avanzados.