Virtusa ayudó recientemente a un gran banco que se enfrenta a la disrupción de su actividad principal por parte de los supercompetidores asiáticos, Tencent y Alibaba. Esta batalla, a pesar de estar circunscrita a una determinada área geográfica, es un caso práctico para las empresas occidentales históricas del sector servicios en su estrategia de movimiento preventivo o de respuesta a los gigantes tecnológicos de EE. UU. (por ejemplo, Facebook, Amazon, Apple, Google), que están en vías de revolucionar sus respectivos sectores.
En este caso, nuestro cliente observó con preocupación cómo Alibaba y Tencent se aliaban, invertían en empresas locales y establecían relaciones gubernamentales en todo su mercado. A nuestro cliente le preocupaba que, al igual que había ocurrido en China, el mercado local estuviera a punto de sufrir un vuelco debido a que estos supercompetidores, cuyas raíces estaban fuera de la banca, se estaban posicionando para desplegar sus ecosistemas más amplios, incluidos los servicios de pago y bancarios, a los consumidores nacionales.
Este documento describe cómo adaptamos una herramienta de estrategia tradicional, el juego de la guerra, para ayudar a nuestro cliente a desarrollar una respuesta estratégica a la amenaza de la disrupción digital. A través de nuestro enfoque, movilizamos a un pequeño ejército de empleados en acción, haciéndolos conocedores de la competencia que se avecina y capacitándolos para responder con rapidez y precisión a las posibles acciones de la competencia.